Incoming Deadline...

Sigo con esta división de sentimientos que me está matando. Sigo sin entender porqué el pasado me atormenta y no me deja pensar en el presente, en lo que importa (¿importa?). Porqué no le puedo poner un punto final a algo que es viejo y que no es relevante (¿lo es?). A fin de cuentas: ¿Qué es lo relevante del asunto? ¿Cómo se comportó ella? ¿Porqué lo hizo?
En realidad, luego de un mucho meditar, pude darme cuenta de cual es el problema. Nunca, absolutamente nunca, me voy a conformar con la desición que tomé; y, lo que es peor aún es que siempre voy a tener la duda de porqué y que la llevó a tomar la desición que tomó. Dejo de lado el miedo que tengo y la depresión maldita que siento por tener que aceptar su desición, pero creo que en este punto de la cuestión yo, ya no puedo hacer más nada; como siempre, está en sus manos.
Y para el que tiene dudas, esto no es venganza ni mucho menos, es un castigo.
Todo vuelve, personas.... todo vuelve...

Viejo pero inolvidable conector de sentimientos...

Perdido en la laguna de mis ideas, busco la razón. Tus ojos, me hablan, no veo nada mas; me quieren decir algo, me muestran tu interior, pero no logro descifrarlo, siento que se enojan, se cierran, pierdo el control, me enojo. Se interponen tus manos, no puedo olvidar tus caricias, me tocan, también me quieren hablar pero no las entiendo. Tus labios no hablan, transmiten todo tu amor, hacia mí. Yo, perdido en mi limbo frío, solo y asustado busco un poco de compañía. Veo tu luz, radiante, cálida, que atraviesa esas pantanosas tierras, solo por mí. Cuantas cosas habré hecho para que vos despiertes hoy junto a mí, y mis terribles pesadillas se espanten, se esfuman solo porque estas a mi lado. ¿Cuantas veces soñé con besar esos labios? ¿Cuantas veces soñé con ver tus ojos por la mañana y sentir que el tiempo no existe?, solos nosotros dos, decias y cuanta verdad tenias, siempre. Cuantas veces soñé con poder detener el tiempo para que juntos estemos sin que nada nos separe.
Hoy mas que nunca creo que tu pelo es parte del viento, se mueven en conjunto, no se separan vuelan juntos. Tus brazos alzados, parece que quisieran volar. Nada puede detenerte, ni siquiera la lluvia. Tus ojos se pierden en el claro cielo. Mientras te observo, pienso que daría la vida por verte volar, lo anhelas con todo tu alma, cambiarías tu vida por poder estar allá arriba, y yo la mía por verte feliz, solo por verte feliz, por más que me cueste morir, quedarme solo o resignarme a lo que más amo en la vida: a vos, si eso es necesario para ver aunque sea 1 minuto la sonrisa que dibujan tus labios, aunque es mejor la muerte a no tenerte. Esa sonrisa que todo puede, un sol para las plantas, una gota de agua para los peces, aire para mí, sos lo único que necesito para vivir. Me transporta a otro mundo, un mundo en donde todos mis pensamientos divagan, y en el medio estas vos, mis pensamientos se escabullen, no se que busco, tampoco se en que dirección buscar, me desespero, no veo una respuesta, no se que busco. Parada ahí tranquila, sin decir nada, siento que tus ojos me llaman, me hablan, me tocan...

Aceptando la desición de dejar ir todo lo que temo perder...

Finalmente, luego de mucho meditar he tomado una desición. Todavía no puedo terminar de digerirla, y, conscientemente, de mirarla de frente, con los ojos abiertos y sin lágrimas. No me deja de doler tener que tomar esta desición, y no se porqué. Estoy intentando desesperadamente, autoconverserme de que todo terminó y de que tengo que seguir adelante, pero no puedo. Todo me recuerda, y mi mente, por mas que lo intente, no puede pensar en otra cosa: en cuanta mentira, falsedad e importancia desacreditada con tan poca acción; todo y sin embargo tan vacio como si nada habría sido suficiente para que esto suceda. Todavía no puedo terminar de comprender porque no tengo los huevos de enfrentarlo, de aceptarlo. ¿Para qué estirarlo? ¿Para qué prolongar el inevitable final?
Hay tantas cosas que me gustaria poner, pero son tantas que no se por donde empezar. Creo que empezaria diciendo que me siento como el orto; vacio y sin ganas, no solo mi corazón fisico, sino que mi alma se encuentra en una desdicha al no saber que hacer, a tener que volver a caminar un camino que ya parecia colonizado y que con mucha fuerza costó atravesar. Con cuanto miedo camino por los caminos sinuosos como si fuera un camino nuevo, simplemente porque me fuistes empujando hacia el abismo que estaba a mi lado y que me hace volver a empezar. Cuantas veces, inevitablemente imaginé este final, pero sin lugar a dudas, jamás imaginé que serias tu misma la que me llevara de la mano hacia lo peor.
Intento mirarle el lado positivo pero no puedo; el orgullo, como siempre presente, no deja de decirme que estoy haciendo lo correcto y que sin lugar a dudas, todo el mundo estaba equivocado acerca de vos, de mi y de nosotros.
Intento no esperar alguna acción tuya, pero me pongo en esta posición esperando que reacciones y que veas cuan grande es el error que estas cometiendo, pero ya estoy cansado de esperar cosas en vano; y, lo que es peor, estoy cansado de intentar hacer que reacciones y que no lo hagas!!.
Intento seguir mirando mi destino, pero el vacio en el pecho me ahoga, me saca la respiración, me hace temblar, me saca el sueño y no puedo pensar mas que en todo lo que se esfumó.
Intento no ser yo, pero ¿Cómo hacer para cambiar y poder seguir viviendo? ¿Como hacer para no dar todo cuando sos todo?
Intento pensar en cual es mi destino, pero la luz de mi vida, ha desaparecido oscureciendo asi, el camino...
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