El eterno forcejeo

Muchas veces me pregunto si esto es lo que quiero para mi, para este nuevo yo; obviamente que estas preguntas salen a flor cuando las cosas se tornan un poco oscuras y el sol parece darse vuelta para no tener otra opción mas que luchar contra mi sombra, que me persigue, como mi pasado. Hay tantas cosas que deberían de ser mas fáciles de lo que son, y sin embargo no puedo dejar de escapar de su inalcanzable acecho. Que una cosa, que la otra, y así siempre hay alguna razón para preguntarme porque logro llegar a estos extremos. ¿Acaso uno sólo corre aquellas carreras que sabe que puede ganar? Debería de ser la pregunta abierta al mundo, a ver si yo solo me exaspero y me deprimo al pensar que nunca puedo terminar algo.
El otro día, mientras releía Un recuerdo infantil de Leonardo DaVinci por el gran Sigmund Freud decía que Don Leonardo tenía un problema: Casi todas las obras artísticas de este genio se encuentran según se citan sin terminar, porque según Sigmund, Don Leonardo tenía tal canon de perfección que le costaba conseguir completar algo. ZAZ! Dejando de lado la ilusa comparación entre él y yo, me di cuenta de que yo soy parecido pero en un extremo mayor (y mucho peor!): Ni siquiera empiezo a hacer algo, porque se que no va a ser perfecto y ¿qué consigo después? No haber hecho nada, sentir que pasó el tiempo y angustiarme porque pasa el tiempo y no hago nada. Y me ahogo en un círculo vicioso del cual lo único que tengo que hacer es respirar, tomar aire y dejar que las cosas fluyan y salgan, como salga. Maldita eficacia y eficiencia del capitalismo del siglo XXI (Si, como para buscar un responsable abstracto a quien responsabilizar del cual no se puede escapar ni luchar!)
Dios, mataría por una cerveza helada, con un buen habano en la terraza, acompañado de un piano suave, cerrar los ojos y sentir que el viento me lleva para no verte tanto, para no verte siempre futuro fugaz y presente que me golpeas el hombro al pasar...
Quiero paz; y nadar sobre un río de paz del cual no despertar y no tener que estar mirando a cada minuto, ese maldito reloj que controla el tiempo, que no tengo, que perdí vaya a saber uno donde...

1 Sentimientos

... dijo...

una prueba de como el perfeccionismo puede complicarte la vida no?... creo que tenemos que buscar siempre hacer las cosas, no sin tratar de mejorarlas, siempre hay que superarse , pero dejar de lado la obsesion de lo perfecto, porque en su busqueda cometemos mas errores que si no la buscaramos...