Dolor Plus: 30% Más Dolor, 60% Más Sufrimiento

Hace varios dias que te tengo en mi cabeza; todos los momentos los relaciono con vos, conmigo y con nosotros. Aunque me haya prometido no volver a escribir sobre vos, parece inevitable e imposible no hacerlo. Y parece mentira, pero mientras más quiero olvidarte, más adentro de mi cabeza estas.

¿Se supone acaso, qué escribir esto me tiene que hacer sentir mejor? ¿La música, debería de hacerlo?

Y lo peor de todo, es que me termino sintiendo mal el doble; y me molesto conmigo por ser tan pelotudo y seguir sufriendo, por no poder pensar en otra cosa, por no poder seguir adelante. Osea que encima de sufrir por vos, sufro por ser tan boludo.

Cada vez que escribo, es porque estoy pensando en vos. Incluso, cuando no escribo sobre vos!!!

Mirando nuevamente el conjunto veo que en muchos momentos, aparecen amores de agua, encuentros amorosos que se diluyen, se ahogan o evaporan. Que vuelvo sobre ciertas obsesiones: la angustia o la locura entretejidas en la dulzura envenenada de la rutina. Que mi imaginación trabaja con las manos bien metidas en ese barro y suele dispararse hacia el absurdo y el humor. Que la presencia del agua, del mar, siempre constituye un anhelado espacio de libertad.

Sentarme a escribir siempre me angustia. No hacerlo, también. Mi cabeza piensa más rapido que mis manos y se pierden varios fragmentos de mi inconciente.


Las iniciativas son así, violentas, te llenan de entusiasmo y de expectativa. Pero a veces, después de la violencia de la tormenta, del ojo del huracán, cuando nos sentamos y miramos hacia atrás, es inevitable pensar y decir "¿Habré hecho lo correcto?"

Cada hora que se supera trabaja a favor del optimismo.

0 Sentimientos