Palabras sin tiempo

El tiempo. El puto tiempo. Otra vez el tiempo. El tiempo y las palabras, a veces tengo la impresión de que todo ya ha sido dicho ¿qué se puede decir que no se haya dicho aun? El puto tiempo pasa, pero nada cambia a mi alrededor ¿qué puedo decir? Si me estoy, muriendo de a poco, sumergido en la mediocridad, envenenado por esta sociedad enferma, esta sociedad que es un sistema y ese sistema que es un pulpo de incontables tentáculos que sostienen mi brazo mientras me inyecta una muerte lenta.
Muerte lenta y sensual, par alimentar mi dulce paranoia, y mientras tanto corro sin rumbo en la oscuridad de la inmensa noche sin una luz que ilumine mi accidentado camino. Corro tras ese ser, ese estúpido tipo sin forma física del que todos hablan pero que nadie conoce, corro tras ese yuppie, advenedizo y genuflexo al que llaman amor.
Ser un "Monstruo Feliz", es lo único que me importa, aunque esté atrapado en este inconmensurable sitema-prisión, esta cárcel de almas en la que estamos todos. Mi felicidad es su dolor, su ojo sangra si soy feliz, su cuerpo sufre cuando yo río.
Cuidar mi estado de animo es clave para sobreviviré en este mundo de muertos que parecen vivir y donde los vivos simulan estar muertos. Me proponen el asilo de la mediocridad a cambio de mi miedo a la oscuridad.
Quisiera fundar mi reino, encontrar mi magia, hacer la fiesta, amar mi amor.
Y de no ser así, quisiera ahogarme en ese inmenso mar de maldiciones que Dios, amablemente, escupió sobre nosotros.

0 Sentimientos